Campings Vilafranca de Conflent

Entre los numerosos pueblos de Pirineos Orientales algunos tienen encanto y otros un rico pasado. Y después hay otra categoría: los que tienen ambos, como Villefranche-de-Conflent.

 

¿Conoce Villefranche-de-Conflent?

 

Villefranche-de-Conflent es una antigua población medieval del siglo XI. Nació gracias a los Condes de Cerdaña y posteriormente de Conflent que la convirtieron en su capital. A este fin, se construyeron murallas que con el paso de los siglos se fueron ampliando.

 

A continuación, Villefranche fue integrada en otros territorios. Primero en el Condado del Rosellón desde principios del siglo XII, que la convirtió en plaza fuerte del norte del Reino de Aragón. No en vano, pues la población fue asediada por Francia en 1654, convirtiéndose así en uno de los escenarios de la Guerra de los Treinta Años, y más específicamente del conflicto francoespañol. Villefranche terminó siendo francesa en 1659 con el Tratado de los Pirineos que incluía la adhesión del Rosellón a la corona francesa.

 

En 1681, Vauban cambió la imagen de la población. El ingeniero adaptó las fortificaciones para no mantener las murallas tal como las conocían los españoles. Pero ante todo, mandó construir el Fuerte Liberia ya que estimaba que Villefranche era demasiado vulnerable. Por consiguiente, se erigió un impresionante monumento 150 metros por encima del pueblo.

 

Poco a poco, el pueblo ha ido recuperando la tranquilidad y la paz, convirtiéndose en una atractiva aldea donde es agradable vivir. El marco auténtico, testigo de un rico pasado, inspira y atrae a los artesanos. La llegada del mítico Tren Amarillo, que une la llanura con los Pirineos, impulsó tanto la actividad comercial como el turismo.

 

En la actualidad, Villefranche-de-Conflent ha logrado mantener su carácter de antaño. Es uno de los lugares clave del turismo en Pirineos Orientales. Las floridas callejuelas con carácter, los monumentos inscritos en la lista de la UNESCO y las tiendas artesanales atraen a los visitantes. De hecho, la población está incluida en la lista de Pueblos más hermosos de Francia.

 

¿Sabía esto?

 

El Fuerte Liberia sirvió de cárcel del Estado durante el reino de Luis XIV. En 1682, el asunto de los venenos provocó un escándalo. Numerosos casos de envenenamiento afectaron a la Corte, lo cual obligó a las autoridades y al gobierno reaccionar. El caso reveló la implicación de unos cuantos aristócratas como la Marquesa de Brinvilliers y La Voisin.

 

Durante la audiencia de las personas inculpadas, se acusó a varias mujeres. El problema era que algunas de ellas eran próximas de la Señora de Montespan, la favorita del rey. La propia Señora de Montespan acabó siendo objeto de acusaciones. Los rumores nunca probados aumentaron hasta el momento en que intervino el rey. Muchas personas que habían acusado a la madre de los hijos del rey fueron encarceladas, algunas de ellas en el Fuerte Liberia. Luis XIV había decidido que no se podían oír desde el exterior para que nadie oyera sus “tonterías”.

 

¿Cuál es el plan?

 

Paseos, mercadillos de antigüedades y visitas marcarán su paso por Villefranche. No se pierda el conjunto de fortificaciones diseñadas por Vauban. Desde las murallas que rodean la villa, siga hasta la cueva Cova Bastera. Se formó durante la Edad de Hielo y fue fortificada por el mariscal para crear una red subterránea. Diríjase a continuación hacia arriba. Tras subir los 150 escalones subterráneos , descubra el impresionante fuerte. Los distintos espacios revelan los secretos y la historia de este lugar. El panorama exterior es increíble. Podrá ver el valle, así como el Monte Canigó, cumbre simbólica del departamento.

 

Aproveche su visita también para pasear bajo el sol del Rosellón. Piérdase en las calles del pueblo y descubra el Bastión del Rey, la Puerta de Francia o la Torre del Diablo. De hecho, esta última está pegada a la bonita iglesia de Santiago (o Sant Jaume en catalán), una mezcla de arte románico y gótico.

 

Finalmente, también puede dar una vuelta por la montaña. Es una buena oportunidad para tomar el Tren Amarillo desde su punto de salida.

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