El castillo de Montségur, bastión del catarismo

La mayoría de los veraneantes que deciden alojarse en nuestros campings en el departamento de Ariège son unos apasionados de la historia. ¿Es también su caso? Ponga entonces rumbo al castillo de Montségur, bastión del conflicto entre el Reino de Francia y los cátaros.

Zoom en el castillo de Montségur

Montségur es uno de los ocho castillos cátaros más conocidos. Encaramado en lo alto de un “pog” (una montaña en forma de pan de azúcar, también conocida como “puy” o “puech”), culmina a 1.207 metros de altitud. Domina el pueblo de Montségur, así como el conjunto del llamado Pays d’Olmes.

 

El lugar debe su fama al importante papel que desempeñó en el conflicto entre la Iglesia y los cátaros allá por el siglo XI. El castillo fue construido por Raymond de Péreille en 1206 sobre un antiguo castrum y se convirtió en seguida en uno de los principales refugios de los cátaros y los faydits, transformando la localidad de Montségur en un símbolo de la resistencia. Entre 1243 y 1244 el castillo fue asediado a instancias del rey de Francia, Luis IX, bajo las órdenes de la Inquisición. Tras defenderse valientemente durante diez meses, Raymond de Péreille se rindió a la evidencia. El señor negoció su rendición con la esperanza de salvar la vida de sus hombres. Fue entonces cuando el bastión pasó a manos de la familia Lévis-Mirepoix.

 

Si bien en un primer momento los Lévis-Mirepoix renovaron la fortaleza, el castillo fue perdiendo progresivamente su interés. Utilizado durante un tiempo como cantera, acabó siendo abandonado a finales del siglo XVI. El interés por el castillo volvió a surgir en el siglo XIX. En 1862, el castillo entró en la lista de Monumentos Históricos. El propio “pog” también acabó figurando en la lista unos años más tarde, concretamente en 1883. Esta clasificación permite proteger los vestigios hallados en el emplazamiento, que arrojan luz sobre cómo vivían en su día sus habitantes.

 

Montségur es también objeto de leyendas. La más famosa cuenta que tras la disolución de la Orden de los Templarios por parte del Papa Clemente V, los últimos caballeros de la hermandad se refugiaron en el castillo.

 

¿Cuál es el plan?

El castillo puede visitarse de enero a diciembre. Para acceder a él, tendrá que caminar durante media horita. Conviene calzarse unas deportivas o zapatillas de andar y ropa cómoda. La visita arranca con la propia caminata pues numerosas estelas jalonan el camino. El esfuerzo vale la pena, pues las vistas desde lo alto son espectaculares. En un día despejado podrá admirar algunos de los grandes reclamos de la región: las gargantas de la Frau, la meseta de Sault, el Lauragais, el castillo de Roquefixade...

 

En lo alto, los muros del castillo y el torreón siguen en pie, entre ellos su muro-escudo de más de 4 metros de altura. En el interior de dicho recinto su guía le contará la historia del castillo. Podrá recorrer también las ruinas del castrum.

Además de la visita, no deje de pasarse por el museo dedicado a la historia de Montségur. Encontrará en él famosos objetos hallados en la montaña que nos permiten saber más sobre la vida de antaño. El museo incluye una reproducción en 3D del castrum. La animación insufla vida a los muros del recinto, el pueblo y las torres.  

 

Si está usted de vacaciones en uno de nuestros campings Yelloh! Village en Ariège, y también en el departamento de Aude, podrá sumar otros 7 castillos cátaros a su recorrido: Carcasona, Aguilar, Lastours, Peyrepertuse, Puilaurens, Termes y Quéribus. Cabe mencionar que estas fortalezas han presentado una candidatura conjunta para ser declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

 

09300 Montségur

https://www.payscathare.org/les-sites/chateau-de-montsegur

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